Los sentidos es algo innato al ser humano que nos pone en contacto con la realidad, permite que evaluemos nuestro entorno y nos adaptemos al mismo. De esta manera el principal propósito de los sentidos es el de la adaptación, ubicarnos en un ambiente y ajustarnos a sus exigencias gracias a que recopilamos información del mismo. De esta manera lo afianza el método científico, una forma organizada de utilizar nuestros sentidos que plantea una sistematización de las aproximaciones que se deben hacer a una situación novedosa por medio de los sentidos, para poder recopilar el máximo de información al respecto. Cada vez que nos enfrentamos a algún cambio de situación hacemos de forma inconsciente una investigación de la misma, cuyo principal instrumento de recolección de información son nuestros sentidos, y a partir de la comprensión que hace el cerebro podemos desplegar acciones adaptativas que resulten en un beneficio.

El ser humano cuando busca adaptarse a una situación, lo que quiere es, básicamente, evitar elementos que puedan causarle daño de alguna manera y buscar fuentes de satisfacción y placer. En suma, aunque en la actualidad nos han llenado de metas y objetivos hacia la autorrealización, esto no es más que una construcción social del ser humano, pero de forma instintiva, somos bastante básicos, y nuestro comportamiento reacciona, en gran parte, a los instintos y programación genética que poseemos. De forma innata estamos dotados de cinco sentidos: el tacto, la vista, el olfato, la audición y el gusto. Muchos consideran que el sentido más importante es el de la vista, acorde al dicho “el gusto entra por los ojos” pero ciertamente la vista, aunque represente un medio relevante de percepción, no es el más importante instintivamente. Cuando nacemos uno de los sentidos que más nos permite ubicarnos en el entorno es el del olfato, los recién nacidos impactados por la luz, gran parte del tiempo tienen los ojos cerrados, pero su olfato está en funcionamiento constante, y por medio del olor reconoce que está cerca de la madre.

De forma evolutiva el recién nacido aprende a diferenciar olores de diferentes personas y asociar las sensaciones que tiene de cada persona con su aroma. Estos representan los primeros recuerdos del infante y los más perdurables en el tiempo. Un estudio realizado por la psicóloga Silvia Álava para la marca Ambi Pur demostró que las personas recuerdan hasta un 35% de lo que huelen frente a un 5% de lo que ven. El olor constituye un evocador fuerte de recuerdos, según el estudio, el 83% de los entrevistados asegura que recuerda momentos felices con ciertos olores particulares. Además, también se probó una fuerte relación entre los olores y el estado de ánimo de las personas, ya que el 48,7% reconoció que se sienten animados con olores de flores y naturaleza.

De hecho, hay ciertos lugares que asociamos fuertemente con ciertos olores y esto despierta en nosotros deseos particulares, por ejemplo: el cine está asociado con el olor de las palomitas de maíz, si recordamos ir al cine, uno de los elementos más satisfactorios y recordados es el aroma de las palomitas, cosa que despierta el deseo de comer palomitas. Por lo general, los lugares que venden tortas o galletas, también utilizan la misma estrategia de respaldar el aroma natural de la preparación de estos dulces, con fragancias para despertar el deseo de comer de los que vayan pasando por el almacén. También es una estrategia utilizada por ciertos lugares que se dedican a la venta de cosméticos para la mujer, olores agradables nos hacen tener sensación de bienestar, esta sensación es la que realmente compramos cuando adquirimos el producto.

Pero no solo el olfato es relevante, también en los comerciales por medio de la utilización de imágenes y sonidos podemos apelar a los sentidos, incluso a los que no son palpables directamente en el comercial, como el gusto, el olfato y el tacto. Así, en cuanto nos muestran en un comercial de jabones a una mujer teniendo un baño plácido, con la suave textura del jabón y el aroma floral, también nos despierta una serie de emociones positivas que hacen que recordemos el jabón y queramos comprarlo.

 

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También vemos que apelan a nuestros sentidos en comerciales de bebidas gaseosas cuando al abrir la botella resaltan el clic de la misma al destaparse y su sensación fría y burbujeante al tomarla.

 

Comerciales de Pepsi siempre hacen referencia al sonido de la Pepsi y lo refrescante que resulta

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https://www.youtube.com/watch?v=po0jY4WvCIc

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Referencias Bibliográficas

 

ABC. (2011). El ser humano recuerda hasta el 35% de lo que huele frente a 5% de lo que ve. Recuperado de la página web: https://www.abc.es/20111103/ciencia/abci-recordar-oler-201111031630.html

 

Rodas, J, y Cervantes, J. (2017). El marketing sensorial en el proceso de toma de decisiones de compra: análisis exploratorio. Recuperado de la página web: http://congreso.investiga.fca.unam.mx/docs/xxii/docs/13.05.pdf

 

Manzano, R. y cols. (2012). El Marketing Sensorial. Recuperado de la página web: https://emprendimarketingblog.files.wordpress.com/2016/09/marketing-sensorial-comunicar-con-los-sentidos-en-el-punto-de-venta-roberto-manzano-2012-1.pdf

 

García, H. y cols. (2013). El Marketing sensorial: una lectura acerca de su implementación en los almacenes Befit, Chevignon y Vélez ubicados en el Centro Comercial El Tesoro de la ciudad de Medellín. Recuperado de la página web: file:///C:/Users/User/Downloads/2804-5612-1-SM.pdf

 

Descubre Marketing (2014). Los cinco sentidos en el Marketin: el marketing sensorial. Recuperado de la página web: http://descubremarketing.com/sentidos-marketing-sensorial/