Desde que tenemos muy corta edad nos enseñan a investigar como una forma de aproximarnos y conocer el mundo que nos rodea, usando nuestros sentidos formamos en el imaginario una idea de cada elemento que encontramos en el ambiente y posteriormente con el uso de la razón le damos sentido a cada cosa, lo disponemos dentro de un esquema de comprensión que nos permite enfrentarnos a las novedades, dificultades y accionar el comportamiento rutinario. Ahora bien este conocimiento se actualiza de forma espontánea o inducida, para mejorar nuestras destrezas, hacernos más adaptativos y optimizar nuestras probabilidades de éxito en cualquier ámbito donde nos lo propongamos.

 

La actualización del conocimiento de manera espontánea ocurre sin que nos planteemos adquirir nuevas destrezas, como consecuencia de la interacción con el entorno, en cambio la actualización inducida es la que buscamos conscientemente, teniendo presente que necesitamos adquirir nuevos conocimientos para ser más competitivos, estar más alerta de la realidad y desplegar habilidades que demuestren nuestro potencial. Es cuando desde un punto de vista empresarial se recurre a la investigación de mercados, que funciona como un proceso de recolección, organización y utilización de información pertinente al área de relación de la empresa, ofreciendo la oportunidad de identificar y definir oportunidades y problemas relacionados con el mercadeo de un producto o servicio.

 

La American Marketing Association (AMA, 2004) define la investigación de mercados como: «la recopilación sistemática, el registro y el análisis de los datos acerca de los problemas relacionados con el mercado de bienes y servicios». Esta información nos permite tener una visión integral de nuestra empresa en el mercado, conocer la competencia, analizar nuestras fortalezas y debilidades, conocer las prácticas a imitar del competidor, aprovechar cualquier oportunidad de negocio que convenga a los intereses de la empresa, acercarnos a nuestros clientes, conseguir más ventas, hacernos una empresa de relevancia que genere engagement, es decir en pocas palabras, nos forma como entidades competentes para ofrecer al cliente lo que necesita resaltando en el ejercicio de las actividades corporativas.

 

AMA (2004). Dictionary of Marketing Terms (en línea). Http://www.marketing power.com/mg-dictionary-view1862. php?